Bydo |
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| Yo lo veo factible, se ha hecho en innumerables ocasiones, pero la parte difícil es la coordinación, y dejar las cosas claras desde un principio acerca de las intenciones de cada cual y autoría de los textos.
Con intenciones me refiero al carácter de las licencias y enfoque, profesional o aficionado. Si el libro es con ánimo de lucro, hay que hilar muy fino con los posibles beneficios que produzca o la asunción de las posibles pérdidas, y el enfoque ha de ser profesional en el sentido de plazos de entrega parciales para que un autor no perjudique al resto con posibles retrasos.
Si lo que se pretende es crear una serie de documentos para ponerlos a la libre disposición de la comunidad, el ánimo de lucro se elimina, con lo que conlleva, pero hay que tomar en cuenta otros factores que algunos os podéis imaginar, otros lo habrán vivido, y Mikonos nos puede dar un máster.
Un saludo
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